Jesucristo es Aquel en quien el Padre ha ungido con el Espíritu Santo y lo ha constituido «SACERDOTE, PROFETA Y REY».
Nadie nos amará tanto, como Aquel que por nosotros, pobres pecadores, se quitó la corona de gloria para ponerse una de espinas y se sentó en el trono de la Cruz, dando su vida por todos sin excepción.
Nuestro REY Y ÚNICO DIOS Y SEÑOR.
¡¡¡Gracias Dios mío!!! Postrados ante Tu Divina Presencia Amor nuestro queremos amarte y Adorarte, por todos los que no te aman, y Reparar por los que con tanta furia te profanan.
«VIVA CRISTO REY»
¡¡¡Tuyos somos!!!