JESUCRISTO, SUMO Y ETERNO SACERDOTE

Para un Sacerdote esta es una de las fiestas más bonitas que hay en el calendario. Es una fiesta propia de España, y tiene unariqueza impresionante.
Los Sacerdotes recuerdan su Ministerio, y su vocación de servicio a los demás.

El Amor verdadero de un Sacerdote está en el Altar, cada día, cuando celebra la Misa. Un Sacerdote se hace santo “de rodillas”, sirviendo a Dios, pasando oculto, ofreciendo su vida en continuo holocausto, al margen del descanso o de las compensaciones humanas.

Un Sacerdote es un servidor de sus hermanos los hombres. Por ello tiene que ser un hombre enamorado del AMOR.

El Amor verdadero -también el que tu tienes a tu marido, a tu mujer, a tus hijos-, pasa por el sacrificio, si no hay esa piedra de toque es complicado que haya AMOR VERDADERO.
La piedra de toque es simple el dolor. Sin dolor no hay amor. Si uno no está dispuesto a sacrificarse por los demás (tu marido, tu mujer, tus hijos, tus padres, etc.) es que no les queremos.

El Amor verdadero -casi Sacerdotal-es el de una madre que no duerme, al pie de la cama de su hijo enfermo o en las URGENCIAS de un hospital.

El Amor verdadero es el que un padre que llega a casa roto por el cansancio, y quizás con un gran dolor de cabeza, y con una sonrisa se encarga de los baños, prepara la cena, y tiene un detalle de cariño con su mujer.

El amor verdadero es el de un hijo que no quiere dar disgustos a su padres, ni a Dios, y corta con una amistad que le separa de sus padres, o que le hace descentrase de su estudios.

El Amor verdadero es el de unos novios que se quieren muchísimo, pero que saben que su noviazgo puede fracasar si acaban viviendo vida matrimonial, con lo que el matrimonio -cuando llegue- pierde la hermosura de lo desconocido, el amor profundo de una entrega que se da hasta el final.

El Amor verdadero es el que cuida a sus padres hasta el ultimo momento renunciando a otra vida por amor a ellos, y en agradecimiento por lo recibido.

El Amor verdadero es el de un buen Sacerdote que persevera hasta su muerte, sirviendo a los demás, rezando, trabajando, sonriendo, amando.

Dile hoy a la Virgen con fuerza: ¡Santa María, Madre del Sumo y Eterno sacerdote, danos sacerdotes santos!
Padre Rodanes 🔥